martes, 5 de febrero de 2013

OLVIDÉ QUE TE OLVIDÉ

Olvidar a alguien, #Pfff como si fuera igual de fácil que hacer la digestión.
¿Qué es lo que hace imposible semejante actividad?

¿Por qué hacerlo? Tal vez lo mejor sería recordar sin dolor, pero también un acto de mismo grado de dificultad. Aquí empieza a propagarse el virus de negarnos a olvidar, como virus que penetra todo nuestro ser… pero… ¿Qué provoca dicha enfermedad?


El otro día iba en el camión que nos llevaba al avión y un hombre hablaba con un amigo sobre algo que se me quedó tan grabado que me gustaría haberlo interrumpido para decirle  “Algún día voy a escribir de lo que ahora tú hablas…” aunque no le importara.
Resulta que al parecer los dos amigos viajaban a una reunión de la escuela. Después de unos años se juntarían y el hombre le contaba a su amigo la magia de lo que resultaría el reencuentro.
-       Una vez leí un documental sobre la felicidad. – le dijo  a su amigo.
-       Y eso que guey. – Contestó el otro medio dormido.
-       ¡Es lo mismo! – Desesperado el hombre trataba de explicarle. – Dicen que la felicidad consiste en intentar repetir un momento que una vez nos hizo extremadamente felices. Eso intentamos hacer ahora guey, y por eso estamos por subirnos al avión; queremos volver a ser las mismas personas, tomar el mismo vino, escuchar la misma música y en el mismo lugar, para sentir que ese instante cuando estábamos en la escuela de algún modo se repite, pero en realidad los momentos jamás se duplican.

Amé el sentimiento con el que le explicaba al otro amigo que parecía no entender la magnitud de lo que estaba hablando. ¡Que maravilla acababa de escuchar! A esas horas de la mañana cuando pensaba que utilizaría el tiempo que duraba el vuelo en dormir, no pude dejar de pensar.
¿Vivía yo queriendo repetir mis momentos felices? ¿Es por eso que amaba escribir? ¿A caso a través de mis letras revivía mis más preciados acontecimientos una y otra vez? ¿Estaba volando porque quería volver a experimentar lo que se siente la libertad? ¿Deseaba con todas mis fuerzas volver a enamorarme para volver a sentir ese estado tan maravilloso que no he sentido nunca más?
La vida es un ciclo, me lo enseñó Mufasa. El gran ciclo de la vida en el que de una manera mágica fumios creados, nosotros, los días, las flores, el agua que se convierte en nube y vuelve a caer en nuestras narices, en los tejados. Mi ser que un día alimentará a los gusanos y mis escritos que espero algún día, espero, seguirán siendo leídos. Pero ¿qué hay del ciclo del amor? ¿En qué se convierte?
¿Qué es eso que vive en mí que ya no puede manifestarse? Sigo sintiendo amor pero no sé cómo transformarlo. Y aunque es algo divinamente inexplicable, hoy me duele.
¿Duele el amor o lo que duele es no poderlo expresar? Es una pregunta tonta ya que todos los días hay tantas maneras de transmitirlo, a la familia, a uno mismo, a la naturaleza, a lo que amamos…. Levantarnos a trabajar y regalar todo el amor que hay dentro de nosotros… ¡Pero no es lo mismo!
Volví a leer el texto porque sentía que me estaba perdiendo al escupir un sin fin de ideas que hoy durante el desayuno me vinieron a la cabeza. Y aquí estoy en Chapala escuchando a Beirut mientras mis amigos toman cerveza, aislada, pensando, tratando de explicar por qué a veces me siento así.
Es lo malo de todo, de esta “enfermedad” del amor pasado que aunque parezca que no trae consecuencias y sólo nos invita a la introspección como estoy ahora, la verdad es que a algunos así se nos va la vida. En el pasado y en ese aferre de sentirlo exactamente igual.
¿Qué me trae todo esto? Ceguera. No veo lo que tengo enfrente: La vida y un sin fin de personas que quieren formar parte de ella. Pero no los dejo porque voy a decir algo muy triste pero es verdad y sé que no me pasa sólo a mí: Tengo flojera de echarle ganas a volverme a enamorar. Listo ya lo dije.
¿Para qué? Ya conocemos la historia y cómo termina. Y sin quererlo dejamos pasar invitaciones y oportunidades mientras viajamos con la bandera de soy feliz #ForeverAlone y nadie me va a sacar de este berrinche que me posee.
Soy joven, la paso bomba con mis amigos y no voy a dar un paso más. Y con esta filosofía de vida declaro oficialmente iniciada la zona de confort. Si alguien me invita a salir prefiero cancelarle e irme con mis amigas, visitar mis mariscos preferidos y ver una movie romántica sin aceptar que me encantaría ser la protagonista y que ese artista cuerazo me estuviera persiguiendo a mí en el avión. Por el contrario me aviento el comentario de “Que cursi peli” y abro una cerveza bien fría, como si ninguna revolución estuviera pasando por mi cabeza y no se diga corazón.
Así me pasó hasta que decidí poner fin a este berrinche iniciado por un dolor que como dije antes, intentamos olvidar y a la vez buscamos recordarlo como un guilty pleasure al que somos adictos.
What a situation… y como la peli de la inauguración del festival de cine “Another year” del director Mike Leigh, es que fácilmente y sin darnos cuenta, así se nos puede ir la vida.
Creo que mi artículo pasado habla exactamente de lo mismo… ¿Será que estoy atorada en esa situación? Ja, no se crean no estoy precisamente creo que por eso es que escribo ahora que hago consciente cómo actuamos inconscientemente por la vida tomando actitudes que no analizamos de donde vienen.
Justo hoy decidí liberarme de eso y empecé a caminar del estacionamiento a la oficina con mi mente decidida a romper ese círculo de aferrarme a querer repetir mis momentos felices como lo indicaba el niño del avión y abrí este borrador que había empezado en Chapala y me había negado a publicar.
Así, la decisión fue sólo el primer paso. A veces da más miedo atreverse a ser feliz. Vivir del pasado es más simple y melancólicamente controlable por una filosofía de vida consecuencia de un berrinche que proviene de un dolor que no quise enfrentar. Así que señoras y señores, hoy elevo mi ancla, no sé a dónde voy, pero no dejaré que me lleve la corriente porque levanto las velas para dirigir mi rumbo, ya que mi amor propio no me permitirá perderme de nuevo.
Tal vez en ese camino me encuentre con buenas personas pero que siguen ancladas y no las esperaré porque sigo mi camino, tal vez en esos rumbos me encuentre con más personajes y con suerte entre esos me tope contigo y para felicidad mía, busquemos el mismo destino.
Gracias por leer.
PD Amo el feedback!
@lucialadeflor

PARA SEGUIR TODOS LOS DETALLES DALE "LIKE" A MI PÁGINA DE FACEBOOK  http://www.facebook.com/LuciaLaDeFlor  Y TWITTER
@lucialadeflor

también pueden seguirme en mi blog lucía la tapatía
http://blogs.quien.com/lucia-la-tapatia/2012/04/11/olvidar/

8 comentarios:

  1. Me agrada tú idea de pelis y cerveza ¿que se arme no? Hahaha. Hay una frase de no sé quién pero me gusta y te la compartiré, con respecto a eso que navegaras a donde te lleve la corriente y dice: "No sé a donde voy, pero si quieres ven conmigo".
    Espero que te ayude y te guste.
    Besos y abrazos Lucia.

    ResponderEliminar
  2. Creo que desde ayer que te escuche en el programa de radio pude entrever que estas de nuevo #foreverAlone??? Yo me sane solita, obvio con ayuda de mis amigas,las que me pulieron y soplaron, y me enamore de nuevo, sí! por el gusto de esa bonita sensación... Anyways... yo si me pierdo en mis ideas jajaja asi que mejor te sigo leyendo ;) AudreyL.

    ResponderEliminar
  3. Causalidad, casualidad, azar o coincidencia, creo que nada es azar, pero tambien creo que es normal que muchos de nosotros pasemos por esa etapa de foreveralonismo, (hah o dije como sindrome o sintoma verdad,) .y... todo eso que dijiste que cae como dicen como anillo al dedo y dices hey tambien me pasa algo similar y piensas bien eso significa que no soy la unica en este mundo que le pasa, Gracias!

    ResponderEliminar
  4. Es dificil olvidar a alguien que ves todos los dias en la uni, más no imposible seguir adelante, y si ese amor que tenemos y queremos demostrarle a alguien, mejor nos amamos más nosottos mismos, es mejor, y que cada momento sea para ser felices. Lucía en verdad me encanta leerte :) me identifico mucho contigo...

    ResponderEliminar
  5. Vivir en una burbuja no es vida, la vida hay que vivirla aunque algunas veces duela, nadie se cruza en nuestro camino por error, la vida sigue y no nos espera sigamos adelante, sonriendo y disfrutando de todos los placeres que ella nos ofrece!! :)

    ResponderEliminar
  6. Gracias por poner esto hoy en Facebook. Creo que te acoso de lo mucho que me gustan tus escritos. Me considero floja leyendo, por eso siempre antes de empezar a leer algo, veo qué tan largo es, y si lo veo largo, lo "bookmarqueo" y lo dejo para después (o sea, ya valió). Con tus escritos, siempre los dejo abiertos en mi pestañita, para hacer mis pendientes del día antes de leerte pero me aseguro de hacerlo y de que no se quede en los bookmarks. Es garantía leer a Lucía la de Flor. Y hoy me ayudó mucho leer esto. Mil gracias y un beso.

    Erika

    ResponderEliminar
  7. Te descubrí ayer y me encanta leerte... en este momento de mi vida yo también elevo mis anclas para dejar de vivir del pasado.. Gracias

    ResponderEliminar
  8. Wow... a veces tratamos de protegernos tanto, que simplemente nos olvidamos de vivir, por miedo al dolor. Pero es mejor tener un recuerdo doloroso, que un montón de fantasías lindas, no? Me uno a tu búsqueda, a encontrarme a mi misma y en el transcurso a no cerrarle la puerta a los que puedan llegar, que al fin y al cabo alguna enseñanza dejan.

    ResponderEliminar

Deja tu comentario, es lo más sabroso de escribir... :)