Hace unos días soñé la peor quesadilla del mundo.
Soñé que iba a que me cortaran el pelo
- cosa que nunca hago, yo misma me lo corto desde los doce años –
y le decía “despúntamelo nomás”
y me cortaba más de quince centímetros…
¡Estaba fúrica! Había atentado contra mi integridad, contra lo más preciado de mi ser.
Entonces me levanté y le dije a mi “rumi” lo que había soñado,
ella dejó lo que estaba haciendo y me dijo
“Cuando sueñas eso quiere decir que quieres desprenderte de una persona que no te conviene pero tienes miedo…”
Separaciones, esa palabra que a veces no queramos que exista y es tan necesaria…
Todavía recuerdo cuando fui con Marissa al casting de Disney Channel. El fin de semana anterior nos habíamos tomado fotos con cámara de rollo y a nuestros 18 o 19 años nos lanzábamos a la vida porque lo escuchamos en la radio.
Mis treinta segundos de casting, vaya que una personalidad que no conocía se apoderó de mí y hablé como la de “cositas” : Amiguitos, los amo, amo la vida y espero que todos en casita estén muy bien… – Tonta. Por querer llenar expectativas de lo que querían en el programa me porté como quién sabe quién haciendo quién sabe qué. Si supieran que mi increíble personalidad era suficiente para pasar a la siguiente ronda.
Me fui fracasada al igual que mi ojiazul amiga. “Ni que estuviera tan padre…” dijimos. El mismo sentimiento veo en las modelos de American´s Next Top Model que eliminan y las graban unos segundos para despedirse… algunas dicen algo así como “estoy orgullosa de haber llegado hasta aquí” otras sin embargo dicen algo así como “No era lo que esperaba, mi meta era llegar hasta la final y lucharé por seguir con esta carrera puesto que este adiós no será para siempre…” Yo las divido en dos grupos: las que de verdad no querían eso y las que sí.
Hace poco que a penas voy forjando mi camino, hacia donde quiero ir y todas esas cosas de adulto que me chocan y amo a la vez. Pero me he dado cuenta de algo: Cuando deseas algo con todo tu corazón nada te detiene. Porque cuando se quiere algo los obstáculos son retos y cuando no se quiere tanto se convierten en excusas.
Pasando toda esta teoría al tema del amor le tengo a alguien este tema muy “debido” desde hace mucho… tú sabes quién eres, amiga mía. Íbamos en el carro y me dijo que cómo se le llamaba a los “frees” en Guadalajara.
- Ah, te refieres a los frees de planta.
- Deberías escribir sobre eso Lucía.
¿Hace cuánto fue eso? Sólo unas fotos en facebook pueden ayudarme a saber la fecha pero hace mucho. A partir de ahí me di la tarea de intentar investigar todo este mundo inexplorado de los “frees”.
Opiniones encontradas en facebook… gente que decía que era lo máximo, personas que no. Mi conclusión, espero no sea criticada porque ando sensible, es basada en la experiencia de la gente alrededor sumada a la mía y es la siguiente:
Comienzas a relacionarte con otro ser y parece ser fabuloso, lo besas, ¡Qué importan las reglas! Estas completamente feliz. No importa lo que pase o a donde llegue esto pero estar saliendo consecutivamente se vuelve la razón por la que le des buenos días a los albañiles, le des el doble de propina a la cerillita hermosa o le digas a tu mamá ¡Qué rica está la comida!
No cabes de felicidad. ¿Qué pasa después? Si eres mujer te aseguro que comentarás el punto con tus amigas… “Ya fue mucho beso ¿no?” Comienza la confusión entre “estar quedando” y “this is it!”. Y si le pregunto me voy a ver como la vieja intensa… o sea estamos en el 2012.
Así que te callas y sigues. Comienzas a tener vacíos en el estómago, te pones celosa si saluda muy efusivamente a alguien más y sonríes como la niña más buena onda y liberal y “cool” del mundo. Tengo que ser segura de mí misma. –Piensas.
Llega la boda de tu amiga y no sabes a quién invitar. ¿Le digo a él? ¿O sea qué va a pensar? Entonces de la manera más buena onda que encuentras le dices que tienes una boda y que pues te gustaría que te acompañe pero no es nada del otro mundo. ¿Nada del otro mundo? Espera a que escuche eso tu mejor amiga que casi casi te nombra dama de honor. Pero bueno, tienes que hacerle ver a tu “galán” en cuestión que “es una boda equis…”
El contesta muy tiernamiente “Hermosa, falta un mes… ¿Luego vemos no?” Te abraza y dices “claro, ¿En qué estaba pensando? Me vi súper intensa diciéndole un mes antes…
Pasan los días… tus amigas se reúnen para asuntos de la boda… tú dices que no sabes si irás con pareja después de que te lo preguntan veinte veces… mientes y no admites que ya le preguntaste y dices “hay pues ya veré…”
Dos fines antes vuelves a tocar el tema con aquel niño que te vuelve loca. Han seguido viéndose y crees que dos semanas es correcto para preguntarle. “Entonces… ¿te late la boda?”
- Nena, es en dos fines ¿Verdad?
- Sí. –Contestas esperanzada.
- Es que ¿Qué crees? Se me hace que ese día es la despedida de Beto y vamos puros hombres a una comida súper lejos.
- Ah… ¿Pero ya es seguro?
- No, igual te confirmo, si no te acompaño ¿Va?
Te tranquilizas y le dejas al destino si vas con pareja o no. “Ya no depende de mí” – Piensas.
El fin de la boda resulta que no hay ninguna comida de Beto y le dices “Anda ven, va a estar divertida”.
- Híjole gordita, ni traje tengo, la neta mejor ve con tus amigas yo ni conozco a nadie, no quiero que me estés atendiendo y eso, mejor diviértete…
Así, por el resto de los siglos amén. Yo me pregunto. ¿Cuándo va a conocer a tus amigos? ¿Es importante? Me hago un “coco wash” pensando “Pero si yo me la estoy pasando bien…” Entonces poco a poco me alejo de mis amigos y me quedo con el en deliciosos fines de semana donde el cine y las cenitas se vuelven el pan de cada día y además, es un hecho, somos tan compatibles que no dudo poco a poco coincidamos en algún evento social y mis amigas ¡Lo van a amar!
¿Saben cuándo llegó ese momento esperado por nuestra hermosa mujer esperanzada? Nunca. Vamos a la versión de él.
Comienzas a relacionarte con otro ser y parece ser fabuloso, lo besas, ¡Qué importan las reglas! Estas completamente feliz. No importa lo que pase o a donde llegue esto pero estar saliendo consecutivamente se vuelve la razón por la que le des buenos días a los albañiles, le des el doble de propina a la cerillita hermosa o le digas a tu mamá ¡Qué rica está la comida!
No cabes de felicidad. ¿Qué pasa después? Si eres hombre te aseguro que estás feliz. Punto. Meses después te acosa pidiéndote que la acompañes a la boda de sus amigas y finjas amar bailar y te pongas un traje que odias y le platicas a tus amigos en la jugadita que “ya le brillaron los ojitos a esta morra” y que tienes que empezar a guardar tu distancia. Comienzas a ver a más niñas.
OK qué dura fui con los hombres, lo siento, no creo que todos son así, es sólo que este es el ejemplo clásico que pasa día a día en los rincones más comunes y corrientes. De verdad, mis investigaciones no mienten, aunque no dudo que exista el caso opuesto, pero esta vez hablo por el caso donde “He´s not that into you” y claro que habrá casos en que las mujeres nos pasemos de listas y les demos alas a niños increíbles para después sacarnos la de “Te veo como amigo…” Lo sé, es sólo que este artículo me pidió que lo hiciera una mujer y sobre este caso en específico así que no me lo tomen a mal hombres ¿sas? Continuamos.
Es aquí donde el ejemplo de la niña de 18 años que fue a Disney Channel con su amiga de 18 también cobra el sentido más puro: No estábamos interesadas pero queríamos probar, cuando resultó el primer obstáculo nos fuimos conformes. ¿Saben quién ganó el casting? Una persona que viajó al casting de Monterrey y le dijeron que no, luego al de Guadalajara y cuando se lo toparon en DF de nuevo le dijeron “te quedas”. ¿Me doy a entender?
Cuando estás pasándola de una manera envidiable con tu “pareja” o “free” o como sea y de verdad están disfrutando al máximo de ellos mismos yo opino que el título no importa, el estatus en facebook menos, pero lo que sí se me hace raro y no me causa coherencia es que esa persona no quiera involucrarse más en tu vida. No te digo que se haga mega compa de tu tía Gertrudis, pero que quiera estar en tu vida, que quiera exclusividad contigo y no de que “hay que salir con más personas y si alguien se enamora nos avisamos” ¿Qué es eso?
Parecerá de una niña anticuada decir esto pero el compromiso es el producto de las ganas de realizar algo, por ejemplo, de niña quería ser pianista, soñaba, escribía en mi diario querer ser la mejor y dar clases, tenía un piano, me metieron a clases y… ¡Odiaba aprender a leer piano! Era tan rebuscado, se me figuraba como matemáticas. Lo dejé.
Escribí en mi diario que no quería ser pianista que quería ser patinadora pero después de ver las vueltas que daban y la de castillos de hielo donde se queda ciega decidí no ser patinadora y aunque soy buena – echándome flores ¿no? – No quise llegar más allá.
Escribí en mi diario que ya no iba a ser patinadora… escribía mi vida y mis cosas y en un punto me di cuenta que con lo que siempre tenía compromiso era con la escritura. La gente me dice “es que a mí también me gusta escribir pero nunca encuentro el tiempo…” Yo sonrío y en mi mente pienso “Yo encuentro el tiempo porque amo escribir”. Cuando quieres algo simplemente ¡Te las ingenias! Sacrificas, cambias, dejas, tomas, aceptas los retos…
¿No pasa lo mismo en el amor? Y creo que en este punto cuando amamos a alguien tanto hasta lo excusamos diciendo “Es que es hombre… así son las viejas… la neta es que me tocó uno muy tímido y tengo que tomar la iniciativa… Tal vez estando conmigo cambiará…” Vivimos disculpando sus detalles que son causa de la falta de interés y exagerando aquellos otros para que las amigas o tú misma se crean una historia que jamás ha comenzado a escribirse y curiosamente ya estás viviendo.
No estoy en contra de los besos que se dan sin causa alguna… pero hay que ser conscientes de que no son una herramienta sólida para construir algo que estás buscando.
Así que yo te pregunto ¿De verdad quieres un free? Alguien al que no le intereses tanto para ocupar el lugar de pareja pero del cual obtengas algunos beneficios. Si de verdad lo quieres ¡Sé consciente que eso es lo único que vas a obtener! O cuando menos lo pienses escucharás el crack de tu propio corazón y verás como cae en pedacitos y desde la planta alta tu mamá preguntará ¿Qué se quebró? – Y en tu tristeza y humillación no podrás admitirle que tu corazón. Recogerás las piezas y … y no la pasarás bien. Dirás que aprendiste algo pero lo que aprendiste no es fruto de lo que él o ella te enseñó sino de la situación en la que te metiste. Apostaste con cartas bajas y te engañaste a ti mismo pensando que era lo único que querías. Quisiste jugar al chico o chica 2012 que no presiona, que es súper casual y vive al día…
No niego que he pasado por eso… hace poco tuve un galán estable yo también. ¿Qué aprendí? Que por más que sea una relación informal es necesario hablar de que ambos están en el mismo canal y que te diga con palabras “no me importas para que seas mi pareja, al menos no ahora” Ya con eso puedes saber si quieres seguir. Pero ambos sexos temen ser honestos y la otra parte teme presionar así que es un tema del que no se habla hasta que alguien salga herido.
Y repito, no hablo de eso “Versus” la “formalidad” del noviazgo que es tenerte de status en facebook y darte el cel de mi mamá para que le hables. Claro que no. Pero para que nos hacemos mensos, en el fondo de nuestro corazón sabemos si la persona con la que estamos está en el mismo canal o no. Y tememos hablar del tema por llegar a perderlo o perderla.
Está bien… la venda durará el tiempo que queramos… porque la otra parte seguro no querrá hacernos entender que “no nos quieren como pensamos…” Por mi parte, espero encontrar a alguien que no tenga los deseos fugaces de aprender a tocar piano o la euforia de patinar, sino la pasión y constancia que me provoca escribir. Y lo mismo te deseo a ti. Pero recuerda, si no sabes lo que vales no tendrás lo que mereces.
Comentarios con dulzura que ando sensible porfis porfis, y si quieren que escriba algún otro tema aledaño como “la venganza de los frees” con mucho gusto mis dedos y mi teclado haremos otra aparición. Besos.
Lucía, no sabes como me ha hecho pensar leer esto, yo estuve por mucho tiempo en la etapa de no querer entender que no nos quieren como queremos por un buen tiempo, tiempo en el que me hice cachitos el corazón pero fingía que todo estaba bien, peor aún creía que un día todo por arte de magia, de un día para otro, él se iba a convertir en el príncipe azul, en el amor de mi vida, en mi futuro, fantaseaba con que se enamorara de mí y como en las pelis me llegara con un ramo de rosas, cosa que no pasó, pero tienes razón, es algo en lo que tu misma te metes y aunque sabes que no está bien que no es lo que mereces ni lo que quieres, lo tomas porque está bonito que alguien te elija a ti para tener onditas cada vez que se ven, te haga sentir especial, porque él galán que todas quisieran tener te quiere para darte unos besos, pero está ahí el error que al menos yo cometí una cosa es querer o amar (como tu amor a escribir) y otra cosa es tener antojo de algo, querer probar algo (como te pasó con el piano y el patinaje), nunca tuve el valor para abordar el tema para decirle que qué onda para dónde iba todo esto, y creo que fue por el miedo a escuchar la respuesta: A NINGUNA PARTE, el miedo a terminar con algo que formalmente jamás tuvo un inicio, jamás hubo un me quiero comprometer más contigo, jamás un acto que te demostrara que le importabas mucho, que te valoraba, jamás lo hubo, y ese don de maximizar detalles ``lindos´´que tenemos las mujeres, es cuando creamos un mundo en nuestra cabeza, donde nosotras somos la mujeres más amada e idolatrada de nuestro chico en cuestión, cuando la cosa es muy diferente, cuando en la vida real no pasa nada extraordinario, una simple llamada nos hace el día, que digo el día el mes!, aunque haya sido una fría conversación de dos minutos, pff, me duele haberme metido en esto, pero no me arrepiento porque me enseño a valorarme, a saber poner límites a mi corazón y a mis instintos, porque cuando pierdo el suelo por alguien, me convierto en la persona más vulnerable, bajo la guardia, y me olvido de las reglas, de lo que debe ser, de lo que me debo, a este hombre lo amé y no me di cuenta hasta que después de haberlo visto una noche de fiesta, me encontré llorando abrazando mi oso de peluche, porque la venda por fin se me había caído de los ojos, por más que el se disculpara, ya no iba a ser lo mismo, ya no era lo mismo, mi corazón estaba roto, en pedazos tan pequeños que me ha costado mucho recuperar y juntar, él después de disculparse intentó una conversación casual, y le seguí la corriente, traté de ser fría, de pensar con la cabeza y no con el corazón, hay días en los que me muero por oír su voz, por tener un whats de él, y no se diga verlo, pero hay otros días, como este en los que recuerdo lo que dolió, y lo que aprendí de esto y ni madres que lo busco! jajaja, y no lo haré, la próxima vez que nos veamos cara a cara, frente a frente le voy hablar con honestidad, con el corazón en la mano, corazón que voy a cuidar y proteger con uñas y dientes, no me voy a permitir hacerle más daño, terminaré con esto, seremos otra vez AMIGOS sin DERECHO, y que diga que ya es mucho que le ofrezca mi amistad, hablaremos claro, le diré que no me da lo que necesito, ni yo a él, y así cerraré esa página en mi vida, para escribir otra, pff gracias Lucía, por tus palabras por escribir esto, no creo en las casualidades por tanto, creo que tenía que leer esto y tenía que escribir esto también. un beso, ana.
ResponderEliminarJusto hoy estaba pensando en eso,me esta pasando y como por obra de Dios di con esto que escribes y entre tanta confusión que traigo ya puedo entender varias cosas, pero sigo en mi idea un tanto anticuada, tradicional o no se, una de las cosas que traía en mente era la de si salir de mis ideas o no; o mas bien tener que hacer una adaptación a mi persona sobre hacer un free.
ResponderEliminarLucia, nunca había tenido la oportunidad de leerte y llegas justo en el momento indicado.
ResponderEliminarEstoy en una situación en la que a mi me querían de "free" y a la vez yo tengo a alguien de "free", no se como fue que llegue a ese punto y duele!.
Hace ya un tiempo conocí un chavo, lindo atento y que me adora, a partir de ahí nos hemos conocido y yo lo quiero muchísimo pero no me convenzo en querer formalizar con el ya que en la etapa de mi vida no puedo entregar todo lo que tengo por dar y para evitar hacerle mas daño en un futuro le he dicho muchas veces que nos dejemos y el no acepta.
Por otra parte conocí a otro chavo a causa del trabajo y se fueron dando las cosas, desde un principio yo quise poner una barrera por la relación laboral, y los dos acordamos que no era apropiado tener algo ante los demás, pero con el tiempo yo esperaba que el pensara que valdría la pena y resulto ser que tenia que ser muy escondido porque el ya estaba comprometido y hace poco se caso, con eso me sentí la peor tonta del mundo por acceder a algo que iba en contra de mis principios y pensamientos.
Actualmente me sigue buscando porque aun quiere que yo consienta una relación sin compromisos (cosa que nunca pasara), pero ahí esta aun el otro chavo lindo, cariñoso, sincero y amable y no se que hacer :S.