martes, 15 de julio de 2014

07 EXAMEN PERSONAL



De los millones de sentimientos que existen ¿Cuántos habré experimentado? 




Me desperté pensando en eso, la lluvia me recordó mis tres días en París, pero también los días en que llovía y mi hermano David y yo salíamos a la calle con una bolsa de basura como impermeable. Y también el día de mi primera cita oficial en toda mi vida, aquel niño había pasado por mí y llovía y en Av. Américas aceleró y el agua por los lados formó como una pasarela de H20. Ah… que lindo fue.



Pero en cuanto a la pregunta:

¿De las millones de maneras en las que puede sentirse un ser humano cuántas habremos experimentado y cuántas nos faltan por experimentar?

¿Cuáles necesitamos vivir para vacunarnos contra ciertas cosas? Porque claro, habiendo protagonizado un número de experiencias determinadas estoy segura que por ejemplo la próxima vez que te enfrentaras a alguna situación parecida no dolería tanto o sabrías que hacer.

¿Es necesario sentirse humillada para recobrar la dignidad y cuidarla mejor? ¿Qué lecciones de vida es preciso pasar para que el aprendizaje me convierta en quien quiero ser? Realmente no lo sé y pienso en todo esto porque en mis primeros días de los 365 que se juntan para otro cumpleaños recapacitaba en que tengo bastantes recuerdos, por lo que la lluvia de hoy podría transportarme a mil ochocientas cincuenta y tres infinitas posibilidades de paisajes donde la lluvia y yo nos encontramos.

¿Lo que debí de haber dejado lo he dejado ya? ¿Ese mensaje que todos los días me llega lo habré escuchado ya? ¿De quién me debí de haber acercado me he acercado ya? ¿De verdad habré sentido el amor o fue el principio de una emoción todavía más grande? Todavía más puro… ¿Qué habré conocido ya que no debo de soltar?
 

En el menú de la vida ¿Qué ordenar? ¿Qué quiero yo para mí? Después de todo será mi platillo, el de nadie más. Y los días van a llover para todos pero donde y con quien estemos será diferente y será nuestra decisión…

El cosmos actúa pero nosotros decidimos cómo abrazarlo. Y dentro de nosotros mismos sabemos si estamos realmente en el lugar que debemos estar o estamos en el lugar que no nos cuesta trabajo estar: La zona de confort.

Lo siento que insita en esto pero es que todas esas preguntas que se me vienen a la cabeza y sobre todo ahora que acabo de cumplir años es una forma de rectificar si estoy en el lugar correcto, en la oficina correcta, en la cama correcta, con las personas correctas… aunque sienta una certeza dentro de mí me gusta cuestionármelo y “zarandearme” si es posible todos los días para no entrar en esa zona de confort donde nos convertimos en seres inertes.
 

Por eso amanecí así, pensando en la lluvia y no pude ser indiferente ante las preguntas que también cayeron a mi cabeza como las gotas. Pum llegaba una, pum llegaba otra… me las contestaba otras no… así es esto. No está de más hacer un examen personal y contestarnos ¿Aquí es donde yo soy la mejor yo? ¿Aquí es donde podría permanecer? ¿Estoy con la persona que debo estar?

Y es que como nada ni nadie nos presionan para que nos orillemos como ratoncitos mientras una señora de tubos nos apunta con una escoba… no nos presionamos y dejamos que la vida siga.
 

Probablemente la persona con la que estamos no nos incomoda… pero ¿Estamos a gusto? Probablemente el trabajo que hacemos no nos estresa… ¿Pero nos reta? Creo que hoy me pasó una auto misión de no esperar a que pase algo en la vida que me obligue a pensar todo esto sino de verdad ponerme sola en la orilla de la cocina como un ratón y ver mi vida encima de mí en forma de señora con tubos.

Con voz de valiente grité en seguida que hay muchas cosas que no sé pero de lo que estoy segura es de que “Im on my way” ¿A dónde voy? Tampoco lo sé exactamente pero dentro de mí tengo ese sentimiento de “Im on my way” y es mi única certeza, bueno tengo otra: también estoy con las personas indicadas.

Si a caso te sientes así: ¡Chócalas! Si a caso hay algo que tienes que cambiar o una decisión fuerte que tomar, ¡no te tardes!… que detrás de todos esos miedos que habitan en ti, creo que siempre tus pasiones y el coraje de ser más “tú” te espera a la vuelta de esa decisión que no has tomado.
 

Porque aunque lo que más de miedo sea quedarse sin nada porque lo que tienes no lo quieres lo suficiente, lo mejor que te puede pasar cuando no estás en el camino correcto es quedarte con las manos vacías, porque si no están así ¿cómo podrán abrirse para recibir lo que viene o tomar otra mano?

En fin, a veces me gustaría decirle a mi cerebro que deje de filosofar a todas horas pero es Lucíamente imposible. Sería menos yo. Así que mejor canalizo todas estas preguntas contigo y nos hacemos bolas juntos mientras te pregunto ¿Tú cómo amaneciste?

2 comentarios:

  1. uff!! perfect timing!!! me encanto!!! gracias!!!

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  2. MIENTRAS ESTOY EN EL TRABAJO Y TENGO TIEMPO LIBRE ME ENCANTA LEER TUS ARTICULOS LUCIA ... AHHH Y COMPARTIR FRASES DE LO QUE ESCRIBES EN FB :) SALUDOS !

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